
Centro Cultural de Beniaján, ¿terminado?
¿Ha vendido José Ballesta como «modernización» la dotación de equipamiento que el Centro Cultural de Beniaján no tuvo hace un lustro?
El pasado lunes 13 de octubre, el alcalde de Murcia, José Ballesta, y el concejal de Cultura e Identidad visitaron el Centro Cultural de Beniaján para anunciar una inversión de cerca de 300.000 euros. La nota de prensa difundida por el Ayuntamiento detalla que los fondos se destinan a la «modernización» del equipamiento técnico y escénico del centro.
El anuncio contrasta con la trayectoria de la instalación. El Centro Cultural fue inaugurado hace cinco años, y durante ese periodo, la infraestructura carecía de la dotación completa de equipos esenciales de sonido, iluminación y proyección necesarios para su funcionalidad.
La realidad del proyecto obliga a cuestionar la terminología utilizada por el Consistorio. La inversión de 300.000 euros no se destina a la modernización o sustitución de sistemas preexistentes, sino a la incorporación de equipamiento por primera vez.
De esta manera, lo que el Ayuntamiento presenta como un acto de modernización es, fáctica y técnicamente, la culminación de un trabajo pendiente que debía haberse completado hace cinco años. En lugar de reconocer que el edificio se inauguró sin los medios necesarios para cumplir su función, el equipo de gobierno ha optado por un anuncio que camufla la finalización de la obra inicial.
Consecuencias de un edificio incompleto
La demora en la dotación del equipamiento ha tenido un impacto directo en la operatividad del centro. El alcalde Ballesta destacó que la inversión corresponde a una pedanía con una «actividad cultural más viva, dinámica y absolutamente vibrante».
Sin embargo, en el lustro transcurrido, la falta de este equipamiento básico ha limitado la capacidad del Centro Cultural para albergar actos culturales y espectáculos de forma continua. El hecho de que la instalación no estuviera dotada desde el inicio plantea la pregunta sobre el criterio aplicado en la inauguración de infraestructuras públicas: ¿Cuántas veces es necesario inaugurar una instalación para que esta sea plenamente funcional a los ciudadanos?
Acto municipal a puerta cerrada
Tal vez para evitar tener que responder a esta cuestión, la visita del equipo de gobierno se desarrolló sin convocatoria oficial. El Ayuntamiento no avisó a los medios de comunicación externos al Consistorio ni a los miembros de la oposición municipal.
La ausencia de estos órganos de fiscalización, vitales para el control público, permitió que el acto se desarrollara sin cuestionamientos sobre la demora de cinco años y la elección del término «modernización» para la dotación. El evento se encuadra así como un acto de consumo interno y publicidad del Partido Popular, y no como un acto público institucional.